No tiene un anillo, tiene muchos; y aunque la astronomía no es mi campo, sé que están formados por rocas y hielo. En general este tipo de estructuras se deben a la destrucción de cuerpos que orbitan el planeta y cuyos fragmentos quedan atrapados por su fuerte gravedad, girando a su alrededor sin llegar a caer nunca, explicado de forma cutre y simplona.
En el espacio todo son fuerzas gravitatorias en constante interacción, y así se producen algunos fenómenos asombrosos, a mi desde luego me aprece una de las cosas más bellas del mundo y de hecho el último relato de ciencia ficción que he escrito para la revista «Principia» transcurre en Titán, una luna de Saturno 😀
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